LAS JOYERAS ARGENTINAS

Las tradiciones asocian la orfebrería y la joyería a las manos masculinas. Se dice ‘el joyero’, y popularmente nadie imagina a una joyera.

Pero hay muchísimas, y este 10 de noviembre, Día de la Tradición, en la revista www.purochamuyo.com / Cuadernos de Crisis las elegimos como parte de lo más destacado de este bienio 2020 /2021, lo que hay que mostrar.

La III Bienal Latinoamericana de Joyería Contemporánea acaba de concluir, con abrumadora participación femenina, y con un conjunto de obras que debieron atravesar la pandemia. Esa Bienal tuvo como lema ‘Abran Cancha’, en sí mismo una declaración de principios, y un motor.

Las y los organizadores afirman “A la pandemia que enlutó hogares y puso en suspenso proyectos y expectativas, le debemos como contracara la transformación que hoy nos permite desarrollar una Bienal mixta, virtual y presencial, y tener de ese modo un alcance mucho mayor que el que tuvimos en las bienales anteriores”.

Participaron 71 artistas, y en este recorrido vamos a conocer a quienes elaboraron sus obras en los talleres de Fabiana Gadano y Mabel Pena, reunidas en la exposición (enmarcada en la Bienal), denominada ‘Mesas de Trabajo’

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TRADUCIR E INTERPRETAR – RECONFIGURAR LA EXPERIENCIA EN OTRA MATERIALIDAD

La creación es un recorrido que provoca incertidumbre. Zigzaguea, se interrumpe y se reinventa. Necesita tiempo de maduración y reflexión. En la búsqueda encontramos senderos, sostienen las artistas-docentes Fabiana Gadano y Mabel Pena.

¿Cuántos mundos, aislados por la pandemia, tienen cabida en el mundo?

¿Cómo traducir en obra los sentimientos de una época tan especial?

Durante el año 2020, nuestros talleres desarrollaron sus clases en encuentros virtuales. El texto disparador fue un fragmento de La Peste, de Albert Camus. Allí aparecen los descreídos, la gente muy temerosa, los que se querían ir, las calles desiertas, la policía con los alto-parlantes diciéndoles a la gente que tenía que meterse adentro.

A raíz del confinamiento, tomamos la chance de experimentar con los materiales que tuviéramos a nuestro alcance, porque tampoco había dónde comprar.

La nostalgia del encuentro y el deseo de achicar distancias a través del diálogo se alimentaban con la necesidad de crear. Las ideas surgieron potentes en la intimidad de cada casa.

Muchas se volcaron a saberes u oficios que tenían olvidados, que quizás habían aprendido durante la infancia -el bordado, el telar, el tejido-, que sin duda va cruzado con lo afectivo.

La exposición ‘Mesas de trabajo’, tiene mucho de lo textil y lo manual, lo que se hace estando en las casas.

La época de aislamiento y el texto de Camus nos puso frente a la sensación de que el tiempo era muy finito, muy delgado: el paso entre estar y no estar, entre estar sanos y estar enfermos.

Surgieron temas muy cruciales como la impermanencia, lo inasible, la conciencia del paso del tiempo, registrar cómo la naturaleza cumplía sus ciclos…

Compartimos esas ideas y creaciones en la pantalla de la computadora, compartimos los procesos de creación de cada una. Se volatilizó la urgencia de terminar el trabajo.

Y reafirmamos la convicción de que lo precioso anida en la manera en que transformamos un material, en todo eso que pensamos frente a aquello que percibimos.

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Posibilidades expresivas de los materiales naturales

Trovador, 2020-2021 – Collar – Fibra natural de sombrero

El azar siempre es asombroso. Uno no sabe qué va a pasar y entonces surge el asombro indispensable para la creatividad.

El calor, el fuego, tan primitivo, que da vida y la transforma

Y esto no hubiera sido posible sin la pandemia. Despertó la imaginación la falta de lo acostumbrado. Nos hizo abrir los ojos, buscar y encontrar.

El camino se fue haciendo, buscando con la mente abierta las formas impensadas.

Y este es el resultado. La unión de lo nuevo, el plástico, con lo antiguo, el telar.

El azar en diálogo con lo razonado y dirigido.

Un soplido del calor transformando un frío material, el plástico, resaltado por el color y la vitalidad de la lana.

Mirta Allutto

Desafíos, 2020 – Collar – Pergamino de cabrito, hilo de algodón, acrílico, tintas

Mis piezas son el resultado de situaciones que se me plantearon durante el 2020: en principio buscar materiales dentro de lo disponible en casa y en momentos de orden, reencontrarme con mis técnicas de base, la pintura, el dibujo, la escritura.

Feliz de conciliar esos saberes y recursos con el contenido y de haber hallado, una vez más, espacio para la reflexión, la creatividad y la esperanza.

Marita Sari

Memoria, 2021 – Colgante – Madera reciclada, alpaca, cobre

Las calles adoquinadas de Banfield son definitivamente bellas y la nobleza de la piedra se amiga sin esfuerzo con el entorno y el arbolado. Tienen para mí el olor de la infancia, de los juegos y de las caminatas al colegio.
Los adoquines de granito cambian con el tiempo, pero su material noble guarda la esencia, como la madera que elegí para representarlos.
Disfruté cuando mis manos tallaron la madera como los artesanos tallaron los adoquines. Cortando, lijando, dando forma a cada uno.
Construyendo este empedrado, reconstruí una parte de mi vida.

Silvina Rebuffi

Al viento…, 2020 – Collar – Varillas de madera de palo blanco, tanza, aprieta tanza

Año 2020. Pandemia, encierro, soledad, desconcierto. Fósforos que se fueron sumando día a día, dando testimonio del paso de horas interminables. Fósforos que pidieron ser revalorizados para quedar dentro de mi historia como algo más que una simple chispa.

Quisieron conmigo volar… y hoy allá vamos… libres hacia el infinito…

Andrea Doria López


Semillas, 2021 – Collar – Biocompuesto de tierra y césped, ramas de árbol, cordón

Me interesa dar valor a materiales humildes y olvidados. Siento una responsabilidad cuando traigo un nuevo objeto al mundo: cada elección es parte de la forma en que construyo la realidad.
La pandemia me encontró en un país extranjero, sin herramientas, sin mis materiales de siempre. Pero tengo mis manos, un jardín y la esperanza de un nuevo comienzo, donde podamos crear con lo que la tierra amorosamente nos ofrece.

Gabriela Nirino


Amarillo uno, 2020 – Colgante – Madera, pintura acrílica, hilo de algodón, plata 925

Abiertas, decoradas, luminosas, habitadas, solitarias, oscuras, melancólicas, cerradas, si en algún momento las ventanas cobraron protagonismo fue en el año 2020 cuando, confinados en nuestros hogares, comenzamos a mirar el mundo a través de ellas.
Nació ese año una primera serie que rápidamente derivó en una segunda, la primera se acerca buscando la vida, la segunda se aleja y convierte ese enjambre de ventanas, edificios y habitantes en figuras abstractas teñidas de un mismo color.

Luisana Castillo


Vulnerables, 2020 – Anillo – Alambre de fardo recuperado de obra en construcción

En 2020 comencé a observar los materiales de las obras en construcción. A lo mejor, inconscientemente, la frase “obra en construcción” me llevó a pensar en nuestro propio ser frente a este nuevo desafío que nos tocó vivir. ¿Cómo continuar? ¿Será que somos una constante y continua obra en construcción? ¿Cómo ordenar esos componentes, cómo lograr tener una base sólida para éstas y otras circunstancias adversas?

Creíamos que podíamos dominarlo todo y sin embargo nos sentimos vulnerables, frágiles.
Re-pensémonos como obras en construcción, tenemos la capacidad de modificarnos, de ser quienes deseamos ser, con la mirada puesta en una sociedad mejor.

Natalia Temporetti




Five o’clock, 2020 – Collar –
Papel hecho a mano de formio y banano, saquitos de té, seda natural

El collar integra una serie pensada en los tiempos de pandemia.

Tiempos de aislamiento, introspección y refugio en los ritos domésticos y cotidianos.

Por eso, tal vez, el té y esos saquitos que, con fibras diversas, hilados naturales y maderas memoriosas, toman del fuego la luz y el color para superponerse, sucederse, ocultarse y mostrarse amalgamándose en la forma de un abrazo protector y reconfortante que ayude a conjurar este novedoso desamparo.

Graciela Fassi


4 estaciones, 2021 – Collar – Esponja vegetal, fieltro

La pandemia nos llevó a darnos cuenta de muchas cosas que faltan o que hay que transformar.
Desde mi ventana, veo la plaza de enfrente, cerrada, sin gente. Arboles, colores y formas en las que antes no había reparado. Esa mirada fue durante mucho tiempo la esperanza, quizás el equilibrio. Llegué a pensar que ése sería nuestro nuevo escenario, el desasosiego.
Las cuatro estaciones pasaron ante mí, como una película, cambiando de paisaje, de colores y de formas. Darnos cuenta de lo que no registramos al vivir apurados es lo que inspiró este trabajo.
Busco el nuevo ritmo, la cadencia, volver a estar en sintonía.

Claudia Scoponi

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Mixtura de materiales

Soplido de dragones, 2021 – Collar – Bolsas de plástico de envíos, lanas guatemaltecas

El azar siempre es asombroso.

Uno no sabe qué va a pasar y entonces surge el asombro indispensable para la creatividad.
El calor, el fuego, tan primitivo, que da vida y la transforma
Y esto no hubiera sido posible sin la pandemia. Despertó la imaginación la falta de lo acostumbrado. Nos hizo abrir los ojos, buscar y encontrar.
El camino se fue haciendo, buscando con la mente abierta las formas impensadas.
Y este es el resultado. La unión de lo nuevo, el plástico, con lo antiguo, el telar.
El azar en diálogo con lo razonado y dirigido.

Mima Rodríguez Romero



Incertidumbre III, 2020
Collar – Alabastro, foamboard, alpaca




Incertidumbre III, 2020
Collar – Alabastro, foamboard, alpaca

Esta obra se gestó en plena pandemia.
El impacto emocional fue muy fuerte, y frente a tanta incertidumbre comencé a pensar adónde iba a dirigir mi mirada.
Amo a la naturaleza, y siempre sentí que ella nos iba a acompañar en cualquier circunstancia y nos iba a cobijar frente a toda adversidad.

En mis largas horas en el taller esa fue mi fuente de inspiración y me llenó de alegría y serenidad.
Espero que mis obras transmitan todo lo que viví en ese proceso.

María Rosa Mongelli

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Expresiones con materiales de origen industrial

Abrazo 1, 2021 – Collar –
Plástico PET reciclado de botellas, cuerda de seda

El abrazo poético, como el abrazo carnal, mientras dura, prohíbe toda caída en la miseria del mundo.

André Bretón

La propuesta refiere al movimiento perpetuo y serpenteante de la vida, del camino elegido, el que se impone, cuya trama es profunda y frecuentemente impenetrable sin un contorno predeterminado.

Movimiento algunas veces azaroso y casual y otras veces consciente que construye una realidad. Es lo que somos, seres únicos e irrepetibles que transmitimos nuestra vivencia a través de la obra.

En estos tiempos, este sentimiento se manifiesta en la necesidad del abrazo, ése que falta, el que se traslada a mi obra convirtiendo la pieza en una única presencia.

Ana Cecilia Mattera


Cuarentena 2019: Felices los peces, 2020 – Collar – Acrílico recuperado, cables reciclados, tanza de acero, alpaca

Las medidas de cuarentena adoptadas en el mundo demostraron nuestro impacto en los mares. Muchas especies marinas vuelven a aparecer en lugares dónde habían dejado de ir a causa del turismo masivo. Los mares albergan el 80 % de toda la vida en la Tierra.

El plástico invade cada rincón de los mares.

La pesca indiscriminada es otra amenaza a nuestra existencia. Las ballenas y los delfines al salir a la superficie fertilizan pequeñas plantas marinas llamadas fitoplancton. Proteger a estos animales significa proteger al planeta. Si ellos mueren el mar muere, si el mar muere nosotros también.

Nadia Curi Antún
Romántica, 2020 2021 – Collar – Plástico de bolsas reciclado

El azar siempre es asombroso. Uno no sabe qué va a pasar y entonces surge el asombro indispensable para la creatividad.

Mirta Allutto


Pérdidas, 2020

Collar – Negativos fotográficos, acrílicos, alpaca

No hubo opción posible, se impuso como el resto de las cosas.

Desaparecieron por instantes las fronteras entre los continentes, los países, las ciudades, las personas.

También por instantes entre los que más y menos tienen, los que más y menos saben, los más y menos se fundieron.

Solo por instantes.

Nuestras vidas se unieron por completo.

Grandes posibilidades se hicieron visibles, también grandes imposibilidades, enormes diferencias.

Contrastes, colores, sombras, direcciones, superposiciones, cortes, pérdidas y porque no nuevas y hermosas formas.

Natalia Astesiano


Recorrido, 2020

Collar – Placas radiográficas, PET (tereftalato de polietileno), tubo de caucho flexible, cordón de goma

Época de incertidumbres, desasosiego, angustia. Necesidad de compartir y paradójicamente obligados a estar aislados.

La joyería es para mí un modo de materializar mis sentimientos. Las líneas, las sombras, las transparencias representan mi mundo, que expreso con materiales que acompañan este camino de búsquedas y encuentros.

Las placas radiográficas conjugan lo personal, lo humano y la identidad con un destino anónimo que traduzco en una pieza de joyería. En ella recupero una nueva y diferente relación cuerpo-joya. Un recorrido.

Claudia Rosenberg


Mares verdes I, 2021 – Collar – Alpaca, sellador uso industrial, pintura, acero

Esta serie deriva de la idea de nuestras individualidades potenciadas en lo colectivo, en la unión, como un mar en movimiento, avanzando. Mares verdes de mujeres entrelazadas, firmemente unidas en una misma voz. Mares imparables.

Hebe Argentieri

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El papel como generador de expresiones

Respira, respira, 2020 –
Collar – Alambre de alpaca, papel

2020. Muerte a solas.

Súplica por respirar.

Despedida en ausencia.

Iona Nieva


Tiempo/Deseo, 2020

Collar – Papel, resina, hilo de seda, óleo

El deseo de tener tiempo y el tiempo sin deseo.

La pandemia, el encierro, el aislamiento, nos enfrentó a un tiempo sin movimiento. Si nada cambia no percibimos el paso del tiempo y se presenta la disyuntiva de ir encontrando el deseo en esta nueva realidad.

Los papeles con los que trabaje también sufrieron el proceso de ir encontrando su forma y color.

Paula Botto Fiora


Gira, gira, 2020 (inspirada en el tango de E. Santos Discépolo: Yira, yira)

Collar – Papel de diario, cartón, hilos de papel, cintas de tela, pintura, pegamento

La circulación de especies de la naturaleza, la circulación de las noticias, las restricciones a la circulación humana.

Giros y nudos se me representan durante la pandemia.

En el impacto que tienen las noticias y su influencia, muchas veces negativa y poco veraces, otras de respeto y solidaridad, que giran, giran y se amplifican, es donde puse el foco de mi exploración creativa.

Liliana Schmerkin

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Exploraciones textiles

Recomponer, de la Serie triángulos del Sur III 2020 –
Collar – Tejido plástico industrial ignífugo, pintura

Ir al encuentro del material, trabajar con lo traslúcido.

Me atrajo ver la superposición de infinitas líneas cruzándose y construyendo dibujos casi refractarios, conectarlo con el proceso artesanal de cosido, me generó un interés diferente.

Expresar a través de la forma y el color el recorrido de la cordillera Andina, que es como la columna vertebral en nuestro territorio, lugar de codiciados recursos como el agua, entre otros.

Susana Ortiz


Crisálida, 2021 – Brazalete – Bioplástico, cobre, alpaca

Me interesa trabajar con materiales amigables con el medio ambiente para que en el futuro vuelvan a la naturaleza. Investigo sobre bioplásticos que son polímeros biodegradables. El plástico es un material muy dañino para el medio ambiente. Aspiro a difundir un sistema de producción alternativo y a re-pensarnos como consumidores.

Estamos atravesando días muy críticos. Hoy se ven amenazados nuestra vida y nuestro ambiente.
Es necesario un cambio, un llamado a la reflexión. Necesitamos transitar el camino de la transformación.

Analía Basilio

Viajemos, 2021

Collar – Rafia de algodón, rafia de Madagascar, paja de seda, chaguar, gasa, seda

Tiempo de pensar, valorar, programar, recordar… y allí la inspiración: viajar, tan gratificante, recordar algunos destinos y pensar en los próximos.

Graciela Provera


En un rincón del alma, 2020

Collar – Mantilla antigua, hilo de cobre, cordón de algodón, tul

En el desafío del 2020, entre el taller virtual y la necesidad creativa apareció en mis cajones un viejo y querido tesoro: la mantilla de mi madre.

Al principio fueron titubeos y cuidados. Ese trozo de “vida” se deslizó muchas veces en mis manos hasta que por fin fue tomando forma.

La obra que presento es un collar que ha dejado de ser recuerdo para ser testigo del camino que nos toca recorrer, nunca solos, siempre en amorosa cadena con los que nos precedieron y los que vendrán.

Susana Mandelbaum


Doméstico, 2021

Collar – Fibras de algodón de mopa, hilos de chaguar reciclados, bronce

La costumbre de darles un reuso a los objetos destinados a la basura se remonta a mi infancia.
Me descubro dándoles un más allá, re-significándolos, pudiendo expresar parte de mi mundo interior y de los mundos que vivo, siento, escucho, sospecho.

Aquí una mopa que ya no limpia.
Doméstico habla de una reclusión, la de las mujeres, y de una realidad que lamentablemente, a través de tanta violencia, lentamente se va transformando.
Se abren paso ámbitos diversos fuera de lo doméstico. ¿Serán de mayor libertad?

Viviana Salotto


Lapso I; II y III, 2020

Anillo – Plástico PVC, acrílico

El tiempo todo entero, todo junto. El intento de atrapar el tiempo que pasa, que se desvanece.


La repetición durante el confinamiento, el paso del tiempo cuando parece que no pasa.
La ventana como conexión con el afuera y el afuera que evidencia el paso del tiempo. La ventana que recorta, enmarca y delimita.

¿Qué pasa afuera? ¿Qué hay? ¿Cómo está ese mundo que ya no puedo recorrer?
Todo queda sujeto a nuestra imaginación y nuestra memoria.

Lara Szwarcbart


Cuerpos, 2021

Gargantilla – Gasa pañalera, cola vinílica, alpaca

La experimentación del material comenzó poco tiempo antes de la declaración de la pandemia, mi trabajo en el taller se detuvo durante el 2020, no pude conectarme con los objetos, ni con el proceso creativo.

El fin de año marcó una metamorfosis, esa angustia y desazón se convirtieron en búsqueda y proyectos. Estos cuerpos que van y vienen suspendidos en el aire, blancos, livianos, cada uno con una trama única y sin embargo conectados entre sí refieren a esa búsqueda, a la transformación permanente urdiendo nuevas tramas de hilos que nos tejen para crear la gran malla de unión con el mundo.

Silvia Abad Prat


Retoño, 2021

Broche – Latas de gaseosas recicladas, resina epoxy, alpaca

Realicé mi pieza con latas recicladas. Desde mi lugar, es un llamado de atención sobre el problema de la contaminación por acumulación de residuos.

La pandemia que estamos atravesando me hizo reflexionar sobre nuestro alejamiento de la naturaleza y nuestra construcción de sociedades cada vez más industrializadas y contaminantes y cómo ese entorno es el causante de nuevas enfermedades.

Mi trabajo aspira a repensar cómo podemos adquirir conductas de reciclaje para gestar vínculos que hagan crecer al desarrollo sostenible.

Rocío Britos



Colección Legados: féminas, 2020

Anillo – Tyvek, cobre, resina, perlas de vidrio de alta fusión

Creo joyas con el amor a la vida, al mar, a su flora. Plasmo pequeñas piezas cargadas de deseo de cambios. Creo desde los trajes de Tyvek y del poliestireno expandido que desecha la industria salmonera y aniquila el suelo marino.

Así surge la colección Legado, acusándolos a ellos de la contaminación en la isla de Chiloé. Pero también con la bella esperanza de que todo es transformable, todo muta, todo cambia, solo debemos poner el alma en ello.
Las mujeres nos hemos tomado el mundo y en honor a ello estas piezas son inspiradas en nosotras…somos fuente de vida.

Bárbara Méndez


DISPO, 2021

Collar – Cuero de cabrito, bronce

El año pasado, transitando el ASPO y el DISPO, comencé a investigar las posibilidades que podía ofrecerme un material como el cuero de cabrito. Logré con él dar formas y volúmenes que se acoplaban bien entre sí.

Fueron meses de experimentación, pruebas, hacer y deshacer. Hoy, continúo ese trabajo, con la intención de plasmarlo en piezas de joyería que sigan comunicando sensibilidades y captando en la materialidad mi pensamiento.

Nora Castillo


Hojas de coral, 2021
Collar – Tejido de ñandutí, anilinas, endurecedor, puntilla, hilo de cera, caracoles, alpaca

Cuando se produce una obra y se expone, se genera un acercamiento e intercambios entre el artista y el espectador.
En ese momento, ambos atraviesan una transformación. Si la pieza emociona, conmueve o transmite un mensaje, logra su objetivo. Todo lo que conlleva la creación de la pieza (materiales, exploración, modificaciones, asombro y pasión) pone en juego los sentimientos del creador, que pueden ser disímiles o iguales de quien ve la obra.

Las obras de joyería, al ser objetos portables, abren una red de posibilidades de visualización y su expansión es infinita. La mirada y la emocionalidad del artista salen de sus manos y – junto con las resignificaciones de quien la porta – siguen su camino impensado que le devuelven al artista el asombro que la pieza le generó.
*Las piezas fueron encontradas en la calle y en el taller de trabajo, son frutos de este camino que recién comienza.

Blanca Gobbo



Mente en blanco, 2020

Collar – Gasa, seda, hilachas, hilos, fieltro

Esta pieza simboliza la evolución interna que sentí al principio de la pandemia y como la crisis
Inicial con la mente en blanco, el vacío, la angustia se transformó transitando por una fase de aceptación para desembarcar finalmente en un clima de empuje hacia el reencuentro con los demás y uno mismo, conectándose nuevamente en un abrazo espiritual lleno de aire y esperanza que permite la conexión humana, tan apreciada luego del miedo y del encierro.
Hay un hilo conector que se entrelaza entre las diferentes etapas anímicas, uniéndose en un  sinfín de matices.

Bárbara Moses





Valija de emergencia con instrucciones para no morir,
2020/2021 – Objeto
Madera de ceiba o palo borracho, bioplásticos con fibras de ceiba, elementos de ceiba tratados, papel, hilos de nylon, cartón

Durante 2020, en el contexto mundial de la pandemia de Covid, tuve la necesidad de explorar materiales naturales que podía colectar de mi entorno próximo. Durante mis primeras salidas de proximidad reparé, a partir de los restos desprendidos, en los frutos de palo borracho.


La cuestión de la evanescencia, lo efímero y lo inevitable del tiempo, fueron abriendo asociaciones y preguntas acerca del momento en que nos encontramos como sujetos y sobre la incertidumbre del devenir.


Una valija de emergencia con instrucciones para no morir explora sobre las posibilidades de la materia viva y sobre lo incierto. Objetos híbridos creados con lo sabido y lo desconocido, para tener cerca en caso de emergencia.

Erica Cintia Mendizábal

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Participantes

Ana Cecilia Mattera / Analía Basilio / Andrea Doria López / Blanca Gobbo / Bárbara Moses / Bárbara Méndez / Claudia Rosenberg / Claudia Scoponi / Erica Cintia Mendizábal / Gabriela Nirino / Graciela Fassi / Graciela Provera / Hebe Argentieri / Iona Nieva / Lara Szwarcbart / Liliana Schmerkin / Luisana Castillo / Marita Sario / María Rosa Mongelli / Mima Rodríguez Romero / Mirta Allutto / Nadia Curi Antún / Natalia Astesiano / Natalia Temporetti / Nora Castillo / Patricia Báez / Paula Botto Fiora / Rocio Britos / Silvia Abad Prat / Silvina Rebuffi / Susana Mandelbaum / Susana Ortiz / Viviana Salotto

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La muestra se realizó en el Centro Creativo El Obrador / Sala El Yunque – Bartolomé Mitre 1670 / CABA / Argentina

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Todas las fotos de esta muestra fueron realizadas por Damián Wasser – https://www.damianwasser.com.ar


Foto portada: obra en concurso de la Bienal perteneciente a Vanesa Pérez Cepeda – Bocas del Tiempo


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